Lesiones en deportistas jóvenes
El tratamiento de las lesiones musculoesqueléticas en deportistas jóvenes se inicia con un diagnóstico preciso seguido de un tratamiento precoz y personalizado
El tratamiento de las lesiones musculoesqueléticas en deportistas jóvenes se inicia con un diagnóstico preciso seguido de un tratamiento precoz y personalizado
Las lesiones musculo esqueléticas producidas durante la práctica deportiva en estas edades tiene connotaciones diferenciales con respecto a los adultos. Por una parte radican en sistemas inmaduros, por otra el potencial biológico de curación es mayor que el adulto por tanto los tiempos de las distintas fases son menores; por otra parte, el mayor grado de tolerancia a las imperfecciones del tratamiento, en algunos casos condiciona la selección para una práctica deportiva determinada provocando la retirada del deportista; además estos deportistas en determinadas ocasiones reciben una presión familiar, ambiental… para incrementar el rendimiento deportivo como salvación de la situación económica o social de la familia.
Las lesiones más frecuentes son por sobrecarga en esqueleto inmaduro o traumático por agresividad deportiva no controlada.
Realizadas estas matizaciones, las fases de la recuperación de las lesiones musculo esqueléticas en este tipo de deportistas no difieren de las de otros deportistas.
Las fases en la evolución de las lesiones para alcanzar la curación son:
Estas fase generales que suceden en mayor o menor grado durante la curación de cualquier tejido dañado, tienen características diferenciadoras dependiendo de la edad de los deportistas, si el traumatismo es de alta o baja energía, si radica en tendón, músculo o hueso , siendo un factor limitante el aporte sanguíneo en el foco de la lesión. Si el tejido ha sufrido muerte celular, se producirá fenómenos de regeneración, en caso de no haber existido muerte celular, solo se producirán fenómenos de reparación, además pueden acontecer fenómenos de fibrosis, metaplasia, depósitos de calcificaciones…
El predominio o ausencia de alguno de estos procesos durante la curación dependerá del tratamiento aplicado desde la aparición de la inflamación, de aquí se deduce que no debemos intentar bloquear la inflamación sino encauzarla (concepto actual de biorregulación de la inflamación).
La aplicación de frío local 10-15 minutos cada 2-3 horas no debe durar más de 24-48 horas desde la producción de la lesión, a partir de ese momento la aplicación de termoterapia local incrementa la capacidad de curación al aumentar la vascularización en el foco de tejido lesionado.
Las medidas medicamentosas, fisioterapia… son realizadas durante las fases de curación una vez terminado el proceso curativo, la readaptación deportiva se hace necesaria para la vuelta al deporte.